Disfrutar de un spa en casa es el sueño de casi tod@s nosotr@s. Recrearnos en el placer con burbujas, aromas y música debería ser de práctica obligatoria.
Es cierto que hoy día gracias a los materiales y elementos que tenemos a nuestro alcance es fácil transformar nuestro baño, reducido y pequeño, en un espacio de bienestar.
Pero también es cierto que para tener un verdadero spa en casa se necesita algo más que espacio y sobre todo, presupuesto.
El espacio agradable e íntimo que te ayudará a recargar pilas, independientemente de su tamaño, deberá contar con unas instalaciones de calidad, un buen aislamiento acústico, una buena ventilación y mucha calidez (con una temperatura ideal entre los 18 y 20º). Aquí se nos irá gran parte de nuestro presupuesto.
Todo lo demás : bañeras, duchas, radiadores, grifería... irá en función de nuestras necesidades y gustos. Si eres de bañera, recuerda que necesitas 45 minutos mínimos, para disfrutar de todos lo efectos de un buen baño, mientras que con 15 obtienes lo mejor de una ducha.
Desde bañeras con sofisticados sistemas de hidromasajes, pasando por duchas con cromoterapia, cabinas y columnas estimulantes, hasta saunas finlandesas , las opciones son muchas y variadas.
Y aquí más que en ningún otro espacio los detalles serán los encargados de convertirlo en ese espacio de mimos que tanto necesitamos. El color, los aromas y la música pueden ya estar proyectados en el baño pero también los puedes añadir tú, haciendo ese momento aún más relajante.
Los inciensos, velas y aceites envueltos en tu música favorita para meditar, relajarte o asearte acabarán de dar esa atmósfera de ensueño a tu baño, donde disfrutar...., sin más.
Fuentes : Pinterest, internet.
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